aventuras y desventuras de un superviviente en la jungla madrileña, germanofilo y amante de la belleza,...preferiblemente femenina.

domingo, 25 de marzo de 2012

Expolio en Sepang

Nuevo atraco italiano
Desvelamos, en exclusiva, las claves de la auxiliada victoria del altivo.

Tras una plácida clasificación para los caballeros plateados de la Britania, nadie imaginaba el desenlace final. Todo transcurría según lo previsto con los Mclaren destacadísimos del resto cuando unas imperceptibles gotas desencadenaron la treta del de siempre, del mismo que aleccionó al de los yates y la Klum, otro italiano, para que otrora enviara al gregario de turno a estrellarse contra el noble teutón en maniobra más propia de la camorra que de las lides deportivas. (vease asunto Briatore-Senna)

El engranaje poderoso y extorsionador de Marianello se puso en marcha y consiguió parar la carrera con la escusa de la primaveral llovizna. Sorprendídisimos por lo innecesario e inédito de la medida, pero temerosos de alzar su voz, por si los agredia un calvo agresivo que iba con una alcachofa ahora naranja, el matón somarra de los paddocks, los lideres vieron reducida a la nada su ventaja por el nuevo capricho rojo.

A la vuelta, y una vez que el más grande, el incomparable y talentoso Jenson en imparable remontada a la cabeza, tuvo que parar, tras ver a un tuercebotas indio, que jamás tuvo que salir de las orillas del Ganges, estampando su monoplaza contra él, el cajón quedó más que decidido

A partir de aqui, un sencillo y pueril acumular de vueltas, disfrutando del cielo gris y las asiaticas risueñas hasta la bandera a cuadros para el asturiano. Y cuando un Sauber,sorpresa! sí un Sauber, imaginense la competitividad de la carrera, apareció confundido por el retrovisor del comefabadas, las amenazas transalpinas se tradujeron en unas ordenes de equipo que escandalizaron al asombrado espectador mundial: "Keep your place, Stay calm, We need your position". El mexicano escuchaba anonadado como su propio pagador le obligaba literalmente a parar el coche, privandole de una gloria al alcance de su mano.

Robo manifiesto que ni los más fanáticos valdebernardianos podran rebatir, expolio solo comparable a los arbitrajes favorables merengues. Deporte sucio, espectaculo manchado, así cualquiera. Una verguenza.

Habrá que esperar nuevas entregas para comprobar la evolución del tractor de Ferrari y el resto de monoplazas. De momento con juego limpio nos conformamos, pero eso, con italianos mediante, es complicado
Un indignado abrazo.
Popotamo

1 comentario:

Anónimo dijo...

A Sepal te voy a mandar a ti! de comisario de pista! fanático!