aventuras y desventuras de un superviviente en la jungla madrileña, germanofilo y amante de la belleza,...preferiblemente femenina.

domingo, 26 de octubre de 2008

MIRACLE FOR EVER- Lancome

Trajin tremendo, empleados corriendo, albaranes por aquí y paquetes aculla, ensordecedor ruido d las máquinas d producción, el sonido d la lluvia golpeando las viseras, las tinieblas del otoño, telefonazos, portazos, gritos

Perdón!

Si dime!- expetó rapido mientras giraba,

y d repente callaron los telefonos, las maquinas nunca existieron, cesó la lluvia, desertizose la oficina, y todo se lleno de la luz que emanaba d su graciosa cabellera de rubio indefinido, quizas rojizo, su figura esbelta, su languida palidez, sus manos, sus ojos...

y empezo a hablar,en un tono melodioso,pero podía estar haciendolo en polaco, en ruso o en checo, pues él nada escuchaba. ensimiasmado, asombrado, solo acertaba a sonreir y mover aprobatoriamente la cabeza, ella tendió su mano y él en gesto mecanico hizo lo propio

sí, sí..

No, no- inquirió ella cambiando el tono-entonces, ¿m facilitas los datos d la empresa?

No, no se- ah...Tendras q preguntar en secretaría- dijo el...-y se estrechanron las manos, mientrás en su repertorio, barajaba torpemente algun elogio que dejase aunq fuera un poco de huella,..por cierto, hueles muy bien -balbuceo, arrepintiendose inmediatamente mientras se escuchaba

miracle for ever - entonó en su lenguaje de sirena

como?

miracle for ever, de Lancome, -y viendo su cara d extrañeza- por si tienes q hacer algun regalo

a quien se lo voy a hacer, si el angel a quien se lo regalaría ya lo lleva?

y sonriendo al piropo, desaparecio escaleras arriba, retornando al azorado empleado a los avernos de lo cotidiano.Los telefonos volvieron a sonar,las maquinas atronaban, la lluvia pugnaba de nuevo por quebrar las cristaleras, la oscuridad se adueño del hall, y malencarados portadores le circunvalaban por todos los frentes.


Quien era? - preguntole inquisitivo un colega.

Pues...-cayendo en la cuenta- no lo sé,.. pero olía muy bien.

se giro lacónico y sus manos se hundieron en los bolsillos, topando algo rugoso en forma de tarjeta,en algun momento debia habersela dado,la leyó, Ewa Noseque.
Sonrió, al menos, tenía su email


bss
kobabumga