"y el futbol se hizo carne y habitó entre nosotros". Incorporación superlativa, criterio diferencial, plus de excelencia. Sumando a Fabregas, se añade dominio del pase en todas las vertientes, corto, largo, pared, profundidad, primer toque, tiqui-taca, además de cambio de ritmo, de tempo, dribbling, presión, recuperación, remate, criterio táctico, variación de dibujo, asistencias y gol mucho gol. Cualquiera que lo haya visto algo con los "gunners" podrá verificarlo. A poco que las columnas centrales solidifiquen, veasé un Piqué más centrado y un acompañante solvente (Masche, más Pujol recuperado) escasa opción le restan a los adversarios de los de Pep, "Rien que faire" como diría mi primo marsellí.
Por otro lado, el otrora buque insignia del dinamitado enesimo proyecto galacticida del florentinato se debate entre dejarse otoñar en un ostracismo millonario en las filas blancas, o buscar salida digna a
ambas partes. Al respecto del "deu soldati", cruzado moderno, hago mia una reflexión que encontré por ahí:
"A Kaká le pasa lo que a muchos. buenos jugadores que algún día llegaron a tener un período eufórico futbolísticamente hablando en el que les salió todo bien ( cuando dicho futbolista alcanza su plenitud física ) que acabó siendo, simplemente una fase temporal, condenada al fín. No era su verdadero nivel. Pero aun así, los medios de comunicación, ansiosos por crear nuevos y artificiales maradonas, e incluso ellos mismos se lo creyeron. Y la verdad es que resulta muy difícil ser capaz de distinguir entre futbolistas en estado eufórico ( Ribéry, Robben..) y verdaderos cracks ( Messi, Zidane ). Sólo el rendimiento a lo largo de varias temporadas ( y puede que varios clubes ) permite entresacar a los de nivel estable de entre los que tuvieron un buen momento y se apagaron ( relativamente, se entiende ). "
En resumen, se promete paseo militar de las hordas culés en todos los frentes, al tiempo
