aventuras y desventuras de un superviviente en la jungla madrileña, germanofilo y amante de la belleza,...preferiblemente femenina.

sábado, 24 de abril de 2010

El rio en lisboa..


Y aparece el rio,y cuando uno lo enfrenta, no sabe si el rio se ha comido el mar o ha sido el mar, el que a lo corsario ha tomado el rio. Porque en es brazo que el plano llama rio, todo parece mar, sabe a mar, suena a tal, la anchura, las olas, los crujidos, la sal, porque se agita convulso, se desplaza, y si sigues el curso encontrarás la torre de Belem, y te asombraras, al leer en la guia, que antes dividia el curso, cuando ahora se margina a la derecha
.


Y es que esa franja de agua si evoluciona, ajena a la ciudad que decidió anclarse en épocas imperiales, y el rio/mar trae barcos, y peces de dulce y salado y gaviotas asociadas a sospechosos vendedores ambulantes, que se mueven con un halo de crisis y pobredumbre que les envuelve y te ofrecen dudosos Lotus y Seikos y con disimulo sustancias extrañas.

Y tu allí mirando las columnas que rememoran la primera salida del golpista de turno a las colonias angoleñas, cuando la torre mediaba el cauce,cuando no llegaban sustancias marroquies, y los vendedores tenían plaza fija en el mercado.

miércoles, 21 de abril de 2010

f1 china: (el maestro, el díscipulo aplicado y el torpe)

La historia de la carrera empezó el sábado, trás la Q3.

Alonso, al que llamán el hippie, por la cantidad de motores que quema, huía de Lobato que quería almorzar con él y presentarle a unos fans de esos pesados a los que hay que sonreir y hablar. En esto que en su alocada escapada tropezó y escuchó:
"vas como un loco, haber salido antes"
quedose mirando al hombre sentado en la hierba, sus monocromos habitos raidos, la mirada perdida, trás aquellas lentes que aparecieron tras tanto leer, la esfera luminosa que cubría su cabeza, las manos cruzadas, lo escaso de su ágape, unas migajas, como si eso sobrase para alimentar su espíritu y pronto comprendió que era un hombre sabio.

Luego llegó Jasón, que huía de Hamilton, que quería copiarle las telemetrías, y tropezó con el mismo tipo, allí sentado, y pensó que perseguía caracoles.

Le preguntó si le ayudaba en su busqueda y el tipo sorprendidó contesto: "El caracol no sale hasta que la hierba no está bien humeda", y atónito por estas palabras,el deportista talentoso miró al asceta, sus parpados semicerrados, la luz emergiendo tras de él, su ropaje humilde gris, eso le bastaba para alcanzar la felicidad, y pronto comprendió que la sabiduria milenaria se acumulaba en aquel osorio enjuto.

Y llegó la carrera y Alonso, recordando las enseñanzas, quiso salir antes para no ir después con prisa, pero claro los jueces impermiables a lo oriental no lo entendieron y le penalizaron, cabrones.

y Jason, al plantearsele el cambio los neumaticos, tuvo presente lo aprendido, y solo pasó a gomas de mojado cuando la pista "estaba bien humeda".

Una elección correcta y la pericia conductora de mejor piloto de todos los tiempos, le dieron la victoria. Una inadecuada aplicación de la doctrina, a pesar de la enésima cesión de plaza por su gregario brasileño, relegaron al asturiano fuera del podium.

A unos metros,el "sabio", en una nueva jornada, se puso el sombrero, protegiendose del sol sobre su testa, se levantó, abandonando la jodida postura de yoga en la que siempre caía sin darse cuenta y que le había dormido una pierna, se desperezó, borrando la mirada perdida, se guardó el envoltorio el coscorro del bocata, que estaba duro.

Ya se había pasado el descanso, se alisó el cascado uniforme, a ver si la semana que viene ya traen los nuevos, y siguió arreglando el cesped, ahora bien humedo, guardandose de capturar cuantos caracoles salían al paso del rastrillo, los que veía, su hipermetropía congenita le había condenado a aquellas gafas, para que los preparase su señora a la que le quedaban muy ricos.