alemania en madrid

aventuras y desventuras de un superviviente en la jungla madrileña, germanofilo y amante de la belleza,...preferiblemente femenina.

martes, 19 de noviembre de 2013

avalanchas de peble


Los centros comerciales de las afueras me resultaban especialmente odiosos. Enormes superficies separadas por areas, una dedicada a la hosteleria, adjunta a unos cines de multiples salas y precios desorbitados, con ofertas para grupos y familias, un supermercado gigante, y otra zona para comprar ropa, accesorios y servicios varios.
Los centros comerciales tenían techos altos, pero según pasabas más tiempo allá iban tornandose angostos y amenazando tu testa, el carecer de cielo, ignorar si era de día o de noche no era de gran ayuda y transformaba el conjunto en unas galerias carcelarias, alcatraz contemporaneo, alimentadas de luz blanca e invadidas por música infernal. No es fácil  tolerar aquellas melodias que el resto te impone, y ante las que era imposible aislarse.
 Pululaban, a ritmo de bachata, las muchedumbres por los pasillos formando grupos de dos. Las parejas eran los visitantes habituales de estos presidios. Ellos normalmente eran tipos grises, de mirada apagada y brazos fatigados de acarrear las bolsas que ellas, infatigables, conseguían reunir saltando de una tienda a otra. Aquí un bolso, allá una blusa, una falda, otra blusa más. Había algo patológico en las ansias acumulativas de aquellas chicas. Ni todas las prendas de la provincia les resultarían suficientes. Acumulaban sin mucho sentido, guiadas por vagos y violables criterios estéticos, sumando prendas que a veces no pasarían de las tres o cuatro puestas. Ellas sacaban bolsas y bolsas, y el hombre perchero, de mirada lacónica y gesto bovino prestaba su anatomía para los portes. Modernos percherones, pacientes san bernardos, escoltas y mayordomos, sacrificaban un tiempo precioso de su vida en pos de casi nada. Había mucho de lamentable en todo aquello.
Los fines de semana la cosa cambiaba a peor, accesos colápsados, invasión de familias, abuelos con goteros,  sillas électricas de minusvalidos, carritos de niños, el marmol era un parque movil para gente que ansiaba espacios baratos, no cobraban entrada, sin escalones ni obstaculos, y la música enlatada llegada desde el estudio de un satánico arribista no cesaba, seguía martilleando, obligando a los transeuntes a elevar sus gritos sobre ella y todo era un guirigay tremendo mientras el techo pugnaba por aplastarte. Los destellos brillantes provenientes de los escaparates tampoco ayudaban.
Esos días uno no podía refugiarse ante el celuloide. Aun ser las jornadas de más alto coste, apenas si quedaban butacas libres. De nuevo las parejitas de pipiolos engañados y mozas cortejadas gobernaban tiránicas en la postal. A ellos, el cortejo les saldría caro, apenas asumible para sus escasos salarios de becarios y aprendices. Cena, mala y fria, en italiano regentado por emigrantes no italianos, más entrada, a cambio de seguramente nada. El ruido era ensordecedor, hasta llegada la media hora había que agudizar el oido para escapar de aquella sinfonía de palomitas reventadas por caninos ansiosos, los platos del italiano aparte de frios y malos tambien eran escasos, sorbetones a desaconsejables refrescos rebosantes de azucar, besos clandestinos aprovechando la oscuridad de la sala, un envoltorio que se resquebraja por allá, alguién a quien no enseñaron a másticar sin airear el paladar, otros empeñados en pregonar su hilaridad y estulticia, al listo se le vé reir al tonto se le oye, a base de carcajadas injustificadas cada tres escenas.
El cine te envolvía en su magia en los días de sesiones semidesiertas o mejor desiertas del todo. Entonces apreciabas la inmensidad de la pantalla, los detalles del fondo, el sonido que te envolvia a la espalda, el hueco existencial que se experimentaba en la sala. Las multitudes tienen la inevitable habilidad de desarmar cualquier encanto. Prueba a poblar de muchedumbre tu panorámica favorita, verás como torna de glamuorosa en eludible. 

miércoles, 2 de octubre de 2013

caracoles picantillos.

Primero habria que conseguir los caracoles, luego limpiarlos bien.

Aquí los metodos son multiples y diversos y varian segun el grado de empatia que se tengan con los moluscos en cuestión, aunque en realidad son todos bastante sádicos. Desde el de dejarles dos semanas en ayuno, para que entren en estado de hibernación y fagociten de sus propios deshechos, hasta el de tenerles una semana comiendo solo harina, hasta ponerlos a hervir con agua sal e irlos pescando mientras van escalando en la cazuela, etc. 

Elige la que más te apetezca en el momento, o mejor consiguelos limpios, o como veais, yo ya empiezo con una cantidad de ellos listos para la olla.

Hacemos un sofrito de cebolla, un diente de ajo, un par de guindillas, una ñora seca espizcada (sustituible por un pimiento choricero troceado, o simplemente nada),un chorizo y unos cuantos taquitos de jamón. Cuando el conjunto coja tono, añadimos tres cucharadas de tomate previamente frito, o freimos uno con todo esto. Luego sumamos los caracoles, un vaso grande de vino blanco y un poco de agua que evaporará. Y dejamos cocer hasta que salga bien el cuerpo de la caracola, 20 o 25 minutos dependiendo del tamaño.

Un dia después estan más buenos. Cuidado y no pasarse con el tono picante, ni salado, si se va a presentar a paladares sensibles.

Acompañar con cerveza alsaciana, o cheka, o teutona, o una doble malta, la que tengais a mano, vaya.

Pd: Receta testeada y con beneplácito.

croquetas al cabrales

Perfeccionada la receta y conseguido el ok culinario del catador Dani, gracias por tu inestimable colaboración, veo oportuno compartirla.

Es sencilla el truco está en no pasarte con la cantidad de cabrales, dependerá de la intensidad del sabor del queso que dispongais pues varia mucho de uno a otro.

La croqueta facil, cinco cucharadas de aceite en el que sofreimos unos cachitos de cebolla, cuando quede translucida añadimos unos tacos de jamón, y después tres cucharadas de harina que removeremos hasta que adquiera color tostado, no dudes en añadir algo de aceite si os es necesario en este paso.

Luego la leche 2 tazas y media, para que la bechamel quede algo lechosa, y vamos removiendo con la cuchara de madera a fuego medio hasta que espese.  Sumamos el cabrales y dejamos que se funda, en mi caso que tenia uno muy fuerte, no pasé de cien gramos, lo importante es que coja el toque la bechamel, no que el intenso sabor del queso enmascare el resultado. Después tiraremos de batidora para el conjunto con el fin de que no queden grumos de harina o taquitos de jamón excesivamente gruesos.

Reducimos la bechamel, conseguido el punto la retiramos en fuente y dejamos enfriar a la intemperie.

Luego formamos croquetas que rebozamos en huevo, pan rallado, huevo, para que no se abran al freir en el abundante aceite a temperatura medio-alta.

Bon Appetit

sábado, 28 de septiembre de 2013

La rueda


Anecdota, verídica:

- se abren las puertas del ascensor y una muchacha d unos treinta y algo proveniente del garage me saluda pizpireta, yo contrariado, devuelvo el saludo y le (es lé, o es lá, a veces no tengo demasiado claro estos casos de laismo, es complemento indirecto, seria "le", pero la tampoco suena mal "la", en fin, rectifico que es de sabios, o en este caso de ignorantes) 

devuelvo el saludo y comento.

- vaya, iba a salir a dar una vuelta y fijaté !se me ha pinchado una rueda!.

La moza, poniendo expresión de horror: Oh! Que faena! La rueda del coche.

Y yo, ligeramente azorado por mi fatalismo: ..no. De la bici.
Y ella, riéndose: jajaja..no pasa nada hombre!. Imaginaté q hubiese sido la del coche. Has tenido suerte!

Y yo, riéndome; !Jajaja...tienes razón. Soy un tio con suerte!. 
Despidiendome hablando en alto como si pensase. "Hay que ver que afortunado soy! Se me ha pinchado la rueda de la bici!!"

Lo malo ha sido hoy, q al ir a cambiarla, no encuentro la bomba! Se la habré dejado a alguién?

q cosas!

martes, 30 de julio de 2013

@olegtinkov Russian enterpreneur

Hacia tiempo que no adjuntaba nada. El calor me desespera, me anula y me crispa. La canícula es la enemiga acerrima y castradora activa de cualquier tarea creativa. El sol mata la imaginación, exaspera el animo y aumenta exponencialmente quiméricas ideas de suicidio, pero para llevarlas a cabo se requiere un valor del que carezco y un esfuerzo que da una pereza horrible a estas temperaturas. Ahora entiendo a los "manitos" de los western, los herederos de Pancho Villa a 40 grados ¿como reprochar que se cubran con un hongo enorme que cubre toda la estela, se desparramen en el  esquinazo, con un palillo entre los dientes y esperen a que la vida acabe o que un gringo forajido despistado con el careto duro les agujere el estómago?

Hoy os comento sobre un personaje peculiar. Uno de esos iluminados excéntricos que sin saber muy bien como han forjado inmensas fortunas, han diversificado sus tentáculos empresariales y ahora se ven aupados en la lista Forbes, esa que la inmensa mayoría de los mortales solo aspiramos a leer a través de un link ocasional una insufrible tarde de julio mientras la chicharras nos taladran los oidos.

El tipo no tiene desperdicio, empecé a seguirle por twitter, la lastima es q la mitad de sus comentarios son en ruso, pero lo poco que coloca en ingles es punzante, cáustico y tiene su punto de gracia. Uno de estos menas que miran al mundo desde arriba. Ojo al video, si habitualmente abandona la casa pronto, regresa al filo de la media noche y después deja el país por cinco días, se asegura un porcentaje de tiempo escasísimo para ver a la parienta, las posibilidades de discutir son ínfimas, eso y que la colega vivirá como una reina le garantizan al empresario una vida conyugal placentera, hasta que la moza decida dar un portazo llevarse una fortuna y explorar nuevos horizontes, ley de ricos, justicia poética y reparto de riquezas.

Fijense en todas las que salen en el video, la doctora, secretarias, programadoras.. coronando en la cuspide sicalíptica con la rubia teñida de moreno, cosas de eslavas, de JP Morgan. O este sujeto hace los castings en una agencia de modelos o se confirman nuestras sospechas que en Rusia el porcentaje de diosas es elevadísimo.

Miren que forma de emplear el pecunio, el rolls valdrá un potosí, y las oficinas parecen sacadas de la mano del diseñador de Maritaki, esos sillones de las salas, artísticos y con la piel perfectamente pulida harían la delicia de cualquier magnate escandinavo. Se ve que allende los Urales, la modernidad ha arrasado los antiguos conceptos espartanos y sobrios de la era bolchevique. La vanguardia nos llega vía Shangay, Hong Khon y Moscú. Os dejo el enlace..ojo a los jocosos comentarios del colega, no tienen desperdicio.